Esta orquídea me la regalaron el año pasado. Traía dos hermosas varetas de flores, una ese mismo día se puso mustia y duró nada, la otra si estuvo muy bonita y se mantuvo bastante tiempo y cuando las varetas se quedaron sin flor y se secaron, yo las corte, luego me dijeron que no se cortaban, que lo más seguro es que ya no iba a echar más. Cuál fue mi sorpresa, que la planta no se murió y que al paso de unos meses empezó a brotar una nueva vareta de flor y aquí está. Para mí, todo un logro que haya sobrevivido un año y que florezca.
